Una buena noticia para los fans de la fantasía. Como se anunció a inicios de este año, Netflix ya tiene disponible la trilogía del Señor de los anillos en su catálogo. Las películas inspiradas en las novelas de J. R. R. Tolkien han regresado en una nueva plataforma donde la experiencia para los espectadores podría resultar totalmente nueva.
De esta manera, la saga que comenzó a inicios de este siglo, ahora puede ser vista cuando quieras y cuantas veces quieras. La trilogía está conformada por El Señor de los Anillos: la Comunidad del Anillo, El Señor de los Anillos: las dos torres y El Señor de los Anillos: el Retorno del Rey.
Recordar que la primera y tercera parte ya estaban en la plataforma. Mientras que la segunda llegó a Netflix este 01 de marzo. Sin duda, ahora no tendrás excusas para revivir las batallas más memorables dentro de la edad media.
Datos curiosos de El Señor de los Anillos
El propio Peter Jackson hace un cameo en La comunidad del anillo. El director aparece en el exterior del “Poney Pisador” comiendo una zanahoria bajo la lluvia.
En un principio, Jackson iba a estar fumando en pipa, pero después de grabar dos tomas y dar las respectivas caladas al tabaco, se le revolvió el estómago, por lo que decidió cambiar la pipa por una zanahoria.
Para lograr los terroríficos sonidos de los orcos, Peter Jackson y técnicos del equipo fueron a un partido de rugby, en Nueva Zelanda, y grabaron los gritos de los espectadores. El público, compuesto por unas 10.000 personas, imitaba los ruidos y sonidos que Jackson pedía específicamente.
El veterano maestro de la espada Bob Aderson, quien impartió las clases necesarias a los actores, dijo que Viggo Mortensen había sido “el mejor espadachín que jamás había entrenado”.
El golpe que Ian McKellen se da contra una de las vigas del techo de la casa de Bilbo no estaba en el guión. El golpe fue un accidente pero Peter Jackson decidió dejarlo en la película debido al gran trabajo de improvisación de McKellen.
El perfeccionamiento del diseño de los pies de lo hobbits llevó más de un año. En conjunto, los cuatro hobbits protagonistas utilizaron más de 1.800 pies. Poner las prótesis a los actores llevaba aproximadamente una hora y media.
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